Hace unos días me regalaron una botella en la que con mucho cariño estaba estampado mi nombre. Es un lujo que solo ha estado al alcance de unos pocos por ser de una cosecha que no se comercializa. En la etiquetado se lee “sólo se embotella para ser degustado en celebraciones de interés histórico-familiar o para rubricar y sellar páginas y episodios de amistad”. Sentí que me caía encima la responsabilidad de ser guardiana de la misma por mucho tiempo. Soy de las que piensan que lo mejor está siempre por llegar. Sin embargo cuando la recogí en mis manos no imaginé que su degustación estuviese tan próxima en el tiempo. Quiero compartir con todos este brindis.
domingo, 23 de octubre de 2011
BRINDIS PARA LA LIBERTAD
Hoy se entregaba en Madrid el premio al ganador del concurso de micros convocado con ocasión del certamen Getafe Negro. Dispuesta a compartir el que yo había enviado, me he dado cuenta de que no era el momento. Es un micro con un punto histórico que habla de guerra y por mis poros en estos momentos solo transpira la emoción e ilusión por el ansiado inicio de un proceso definitivo de paz y libertad en Euskadi. Este es el comienzo de un camino en el que aún hay zonas por desbrozar y no exento de algún tropezón pero como bien dijo el poeta "Camino se hace al andar".
Hace unos días me regalaron una botella en la que con mucho cariño estaba estampado mi nombre. Es un lujo que solo ha estado al alcance de unos pocos por ser de una cosecha que no se comercializa. En la etiquetado se lee “sólo se embotella para ser degustado en celebraciones de interés histórico-familiar o para rubricar y sellar páginas y episodios de amistad”. Sentí que me caía encima la responsabilidad de ser guardiana de la misma por mucho tiempo. Soy de las que piensan que lo mejor está siempre por llegar. Sin embargo cuando la recogí en mis manos no imaginé que su degustación estuviese tan próxima en el tiempo. Quiero compartir con todos este brindis.
Hace unos días me regalaron una botella en la que con mucho cariño estaba estampado mi nombre. Es un lujo que solo ha estado al alcance de unos pocos por ser de una cosecha que no se comercializa. En la etiquetado se lee “sólo se embotella para ser degustado en celebraciones de interés histórico-familiar o para rubricar y sellar páginas y episodios de amistad”. Sentí que me caía encima la responsabilidad de ser guardiana de la misma por mucho tiempo. Soy de las que piensan que lo mejor está siempre por llegar. Sin embargo cuando la recogí en mis manos no imaginé que su degustación estuviese tan próxima en el tiempo. Quiero compartir con todos este brindis.
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